Las copas representan el elemento Agua; esta es una fuerza complicada de manejar ya que no posee forma, sólo se la puede retener con objetos que forme un va´cío donde ella pueda tomar su figura...un vaso, una copa, etc. Todos sabemos que los líquidos tienden a escapar, a buscar su libertad.
La fuerza de las Copas reside en el mundo emocional, son las dueñas de las relaciones humanas, del amor, de la amistad, la proximidad de un ser hacia otro. Es la energía que nos impulsa sin saber porqué a encontrarnos con almas afines para compartir con ellos nuestros sentimientos y de forma especial, con el ser amado.
Su potencia es devastadora, sin ella no sentiríamos el deseo y la necesidad de unirnos a otras personas en busca de nosotros mismos. Maneja los sentimientos, el mundo de lo romántico, del placer, de la alegría. Es la fuerza de todos los fluidos en movimiento, la necesidad de compartir, de hacerse uno con el otro.
Las copas van de la mano de la felicidad, es a través de ellas como sentimos el placer y el gozo, pero también el dolor y la tristeza cuando no somos correspondidos.
Es el palo del sentir, pero ese sentir tiene dos caras, la alegría y el placer, en su cara buena, y la pena y el dolor en su cara mala. De hecho, todos los palos tienen dualidad.
Son también cartas espirituales, marcan la búsqueda interna, la necesidad de unión a una fuerza superior más allá de nosotros mismos. Es la energía que nos aparta de lo material para adentrarnos en reinos más sutiles, menos estables y conocidos.
La intuición también se asocia al elemento Agua, ella es la que nos pone en alerta, la que nos avisa, es como un sentido más; es esa forma de conocimiento inconsciente que no tiene una estructura racional.
Nos hablan del mundo de la pareja. El enamoramiento adolescente, las fluctuaciones y la inestabilidad que provocan estas situaciones. Aunque también puede hablar de sexo, este se asocia más a los Bastos, que es una energía más pasional.
El sentir del alma se expresa a través de las copas, es la belleza de un jardín cuidado, es la emoción que sentimos al leer un poema que nos toca el corazón, el gozo de una obra de arte. El mundo de la sensualidad, el arte de seducir, el placer de amar, el gozar de una puesta de sol.
Las personas copas son poco prácticas y pecan de una falta de lucha o ambición; son un tanto inestables, de emociones fluctuantes.
Se suelen dejar llevar por las circunstancias pues son pasivas, imaginativas y muy receptivas. Al este palo atribuimos a poetas, pintores, escultores y todo cuanto tenga que ver con la belleza, el placer y el arte.